Maison Leroy fue fundada en 1868 por François Leroy, enólogo y dueño de viñedos en numerosas localidades francesas: Auxey-Duresses, Meursault, Pommard, Chambertin, Musigny, Clos Vougeot y Richebourg. Su hijo, Joseph Leroy, junto con su esposa, Louise Curteley, ampliaron su negocio con la elaboración de licores y alcoholes destilados.
En 1942, Henri Leroy, hijo de Joseph y Louise, se convirtió en uno de los dueños de Domaine Romanée-Conti debido a su completa dedicación y extraordinaria gestión. Actualmente está en manos de la familia Leroy y está considerada como la joya de Borgoña.
Lalou Bize-Leroy, hija de Henri, ocupó la presidencia en la dirección general en 1971 y desde entonces, Lalou trabaja para cultivar y elaborar los mejores vinos de la zona a través del estudio de las características del terruño.
Gracias a la inversión millonaria de Takashimaya, propietario de grandes almacenes de lujo en Japón y distribuidor de vinos de Maison Leroy en este país, se llevó a cabo la adquisición de viñedos de Domaine Leroy.